29 ago 2015

Desierto

El primer nombre que escogí antes de línea curva y con el que todovía me identifico, hoy he leído este texto con el que pienso: "sí, soy desierto". 

"El desierto puede hacer que te sientas libre al tiempo que te sabes prisionero de la absoluta negación. El desierto es sano, te llena de vida los pulmones mientras te quema la carne y te abrasa el alma. El desierto te hace fuerte al tiempo que rompe todas tus esperanzas y acaba con cualquier sombra de fe que alientes en el corazón. El desierto es sabio porque te hace sentir, cuando habitas sus inmensas soledades, que algo de ti mismo, se parece a esa terrible afirmación del no ser." Javier Reverte


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